Estados financieros en tiempos de COVID19
La pandemia asociada al COVID–19 ha tenido impacto a nivel mundial en los más variados ámbitos de los negocios, y la contabilidad no es un área que se encuentre ajena a ello.
Algunos de los principales impactos financieros a evaluar por la Máxima Autoridad ó gerencia de las empresas son los siguientes:
- Cumplimiento del principio de empresa en marcha.
- Deterioro en sus principales activos.
- Modificaciones en la estimación de la vida útil de las partidas de propiedad, planta y equipo, por variación en la utilización de las mismas.
- Disminución del valor neto de realización de los inventarios. Medición del valor razonable de activos y pasivos.
- Eventual incobrabilidad de cuentas a cobrar.
- Planes de reestructura organizacional.
- Incumplimiento de convenios financieros y consecuentemente exigibilidad de las deudas.
Dado que el desarrollo de esta situación se ha generado en el 2020, debemos considerar que es un hecho posterior al 31 de diciembre de 2019 que merece ser analizado al momento en que una compañía presente sus estados financieros de dicho ejercicio.
De acuerdo a la definición establecida por la NIC 10, esta situación se ajustaría al concepto de hecho posterior que no implica ajuste sobre las cifras cerradas, pues es una situación nueva que no podría preverse al 31 de diciembre de 2019. No obstante, si se espera que el impacto sea significativo, el eventual impacto debe ser revelado en notas a los Estados Financieros presentados bajo Normas Internacionales de Información Financiera.
El auditor no puede estar ajeno a su realidad, y debe solicitarle a sus clientes el análisis del eventual impacto y mediante la aplicación de escepticismo profesional cuestionar la razonabilidad de dicha estimación.
Autor: Augusto Cardarello, Audit Manager
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